Ciencias Sociales 3 Secundaria Descubre MUESTRA NORMA PACK

Ideas previas 12 ©EDUCACTIVA S.A.C. Prohibido fotocopiar. D.L. 822 Luis XIV, el monarca absolutista llamado el Rey Sol, que se presentó a sí mismo como un ser divino. El absolutismo 1. ¿Qué entiendes por absolutismo? ¿Por qué crees que surgió? 2. ¿Por qué se afirma que el monarca Luis XIV representa mejor la época del absolutismo? Un sistema de gobierno en manos del rey El absolutismo fue un régimen de gobierno que surgió en Europa de- bido a los conflictos religiosos de principios del siglo XVI , los cuales fueron característicos del Antiguo Régimen. Este sistema de gobierno, apoyado por católicos y protestantes, consideraba al rey como autoridad suprema (monarquía absoluta), pues creían que su poder provenía de Dios y que por esta razón, ha- bía que obedecerle ciegamente. La centralización del poder, en manos del monarca, estaba soste- nida por una eficiente burocracia, encargada de ejecutar las deci- siones del soberano. En un principio, los cargos de los burócratas fueron cubiertos por miembros de la nobleza, pero con el pasar del tiempo fueron ejercidos también por miembros de la clase burguesa. Los Estados modernos se preocuparon por acrecentar y organizar la hacienda pública, así como por crear ejércitos profesionales para defender las fronteras, reprimir las rebeliones populares y estar pre- parados para la guerra en un eventual conflicto con otras naciones. El medio más eficaz para mantener la hacienda pública fue median- te la recaudación de impuestos. Los gobiernos absolutistas poseían las siguientes atribuciones: 2 Entre los años 1590 y 1660, además de la peste bubónica, estalló un ciclo de epidemias que ocasionó un número catastrófico de muertes en Francia, Alemania y los países mediterráneos, precedida de pérdidas graves de las cosechas y la consecuente hambruna. Para 1630, por ejemplo, muchas regiones de Alemania sufrieron pérdidas de población superiores al 30 % del total de los habitantes. Atribuciones de un gobierno absolutista Elaborar las leyes del Estado sin que el rey esté sometido a ellas. Administrar justicia. Manejar la economía y recolectar los impuestos de acuerdo con las necesidades del Estado. Comandar el ejército, declarar la guerra o la paz con otros países, según su propio criterio.